Por Miriam Canales
Con más de 40 años de trayectoria, Homero Campos se ha convertido en una de las figuras más calificadas de la escena radiofónica latina de los Estados Unidos, donde actualmente dirige La Z y La Gran D, de Bustos Media. Nacido en Tucson, Arizona, y criado en Yurécuaro, Michoacán, su carrera ha tenido diversos vaivenes y hoy comparte su experiencia mediante esta charla:
¿Cómo ve el mercado actual de la radio en Estados Unidos?
Se ha convertido en una parte más enfocada en la música mexicana: grupera, banda, norteña; también existe el pop, pero es más popular en ciudades como Los Ángeles, Miami, Nueva York, pero yo considero que el número uno es el regional mexicano.
¿Qué espacio hay ahora para las nuevas generaciones que quieran entrar a esta industria?
Lo veo bien, porque creo que la radio necesita nuevos talentos, se necesitan ideas frescas; la personalidad de la radio debe tomar lo nuevo.
¿Cómo ve la competencia hoy en día?
Tanto en México como Estados Unidos se han formado grupos de radio masivos, corporaciones. Parece muy fácil programar en cadena nacional y resulta económicamente mejor a los dueños, pero eso desplaza a los locutores locales. Estamos hablando de mercados medianos, pequeños, esa es otra de las diferencias de la radio actual, ¡pero no vamos a tapar el sol en un dedo!
¿Cómo es el reto de cautivar a nuevas audiencias?
Seguir estudiando los mercados, las olas que vienen de música, observar bien al público. Cuando acudo a un evento masivo donde veo un grupo pequeño de gente los observo y me gusta ver cómo reaccionan, si así lo hacen en persona, así lo harán cuando escuchen la radio. También hay que conocer música nueva.
Pues sí. No es lo mismo el reggaeton ahora que la quebradita hace 20 años.
Claro, y aceptar las ideas de fuera… hay tanta herramienta que se pueden utilizar ahora. A mí me gusta mucho abrir mi mente y saber qué está pasando en otros lugares. En internet puedes escuchar otras cosas. Es muy importante tener la mente abierta a los cambios. Si en los ‘70 u ‘80 hubiera tenido yo una décima de la capacidad que tengo ahora para investigar con internet creo que habría sido el número uno en todo el mundo (risas).
Parece fácil lo de la “mente abierta”, pero no todo mundo lo aplica.
Hay que usar el sentido común, ¡es algo tan bonito y tan sencillo y es tan fácil de obtener! Yo pienso que si le está yendo bien a mi competencia, algo bueno está haciendo. ¿Por qué no aceptarlo y analizarlo y ver por qué les está funcionando? La música que se programa no me tiene que gustar a mí. Muchos locutores que conozco dicen: “Es que no me gusta esa canción”. Y yo les digo: “Mira Pancho, si tu trabajaras en un McDonalds y me dices que la hamburguesa no te gusta y prefieres buen un taco, ése eres tú, ¡pero estás vendiendo hamburguesas y lo más importante es que le guste al público!”.
Usted que estudió una carrera, ¿qué piensa de la fiebre del éxito inmediato, mediante reality shows, YouTube y ser popular de un momento a otro en el tema de comunicación?
Hay personas que dentro de cualquier empleo tienen un talento nato que sólo necesita desarrollarse. Otros que no lo tienen necesitan estudiar y batallar mucho más. Creo que hay espacio para ambos. Yo también creo mucho que las personas que tienen más conocimientos, que han estudiado más a fondo su carrera, son los que tienen un fundamento más sólido y que a través de los años con los cambios les va a ayudar a no ser “llamaradas de petate”.
¿Qué opina del tema Trump y cómo esto puede afectar la comunicación dentro de la radio latina?
Como él ha demostrado tener cierta antipatía, específicamente a los mexicanos, no te sabría decir si le va a afectar, pero posiblemente el crecimiento sí, si es que se convierte en presidente. Hubo unas oportunidades muy grandes en el tiempo de Bill Clinton, se abrió el espacio a minorías, no solo hispanos, donde fue más fácil para ellos adquirir estaciones de radio. Hubo un boom donde florecieron muchas de este tipo. Todos estamos a la expectativa.
Su meta era cumplir 40 años de carrera y ya los sobrepasó. ¿Qué avizora en el futuro?
Yo quisiera seguir trabajando en esto de alguna manera sin límite, pero ya no me pongo números. En 2017 ya llegaré a mi aniversario 45, y lo que quiero ahora es sólo un día más: mañana. Una persona ganadora debe pensar que ya tiene lo que está deseando, y si actúas de acuerdo a esos pensamientos, el universo se va a acomodar para que esas cosas se concreten siempre y cuando sean buenas. La ambición no es mala, lo que sí es atropellar a personas a tu alrededor. En el caso del que quiera entrar a la radio lo primero es soñar, pero teniendo los pies bien puestos sobre la tierra.
Fuente/ Radio Notas